Originalmente como Treblinka y luego de haber grabado un par de demos de cultos en la escena Sueca a mediados de 80s, esta banda se consagra por tener un pasado muy oscuro y mítico antes de empezar a experimentar con Doom, Rock, Goth, y demás aromas experimentales. Sumerian Cry es su primer trabajo de larga duración del que se puede percibir una continuación de lo que fue Treblinka antes de Tiamat.
Con un sonido añejo, primitivo y muy elocuente, propio de la escena Escandinava para destacar esta gran obra, en la que todo su peso cae en las enfermas atmosferas, insistentes bajos que danzan en una conmensurada variedad rítmica y secuencial, algunas experimentaciones de corte blues en el tema Evilized, un minimalismo que opone y sugiere mucha decadencia y oscuridad tomando influencias de bandas como Mercyful Fate, o Celtic Frost.
No es el mejor disco de Tiamat por supuesto, (Quizás lo sería el Wildhoney), pero si cabe destacar el enjambre de violencia que mostraron en su primera etapa para luego alimentarse de otros tantos estilos que caracterizo una incertidumbre y desconexión entre un trabajo y otro, siempre dispuesto a relucir innovación de una manera estupenda.
Necrophagios Shadows (Live 1990)
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